lunes, 24 de diciembre de 2012

¡FELIZ NAVIDAD!



Nuestra edición de hoy 24 de Diciembre de 2012 está dedicado a la natividad, la venida de Jesus niño, nacido en Belén.
Hoy de nuevo queremos honrarle, alabarle, bendecirle y glorificarle.
Darle gracias a nuestro Padre Abba por habernos dado a su hijo Jesús, a su madre Santísima María, a su padre adoptivo José.
Rogamosle que nos de la gracia de que Jesús nazca en nuestras almas, que permanezca en nuestros hogares, en nuestras vidas, en nuestra iglesia y en toda la humanidad.
Su presencia se quede en los enfermos, en los hopsitales, ancianatos, en los abandonados, en los niños, en los desbalidos, en los jóvenes, adolescentes, en las familias porque solo asi podremos caminar en victoria, en paz y en gozo. Les deseo a todos una FELIZ NAVIDAD, QUISIERA PODER LLEGAR A CADA UNO DE USTEDES Y ABRAZARLES ENVIÁNDOLES A TODOS DE UN GRAN AGRADECIMIENTO POR SER PARTE DE SEMBRANDO LAS PROMESAS, página que comenzamos a publicar hace más de seis años, por un llamado del Señor.
Dios nos siga bendiciendo y que podamos seguir trabajando en la obra evangelizadora con la ayuda de todos ustedes, para la gloria del Señor Jesús. ¡Amen!



Natividad de Nuestro Señor Jesucristo (misa de la noche)
Santo(s) del día :
San Charbel Makhluf
Saber más cosas a propósito de los Santos del día


Lecturas



Leer el comentario del Evangelio por : Tomás de Celano
San Francisco ante el primer pesebre de Navidad.
  Evangelio según San Lucas 2,1-14.

En aquella época apareció un decreto del emperador Augusto, ordenando que se realizara un censo en todo el mundo.
Este primer censo tuvo lugar cuando Quirino gobernaba la Siria.
Y cada uno iba a inscribirse a su ciudad de origen.
José, que pertenecía a la familia de David, salió de Nazaret, ciudad de Galilea, y se dirigió a Belén de Judea, la ciudad de David, para inscribirse con María, su esposa, que estaba embarazada.
Mientras se encontraban en Belén, le llegó el tiempo de ser madre; y María dio a luz a su Hijo primogénito, lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el albergue.
En esa región acampaban unos pastores, que vigilaban por turno sus rebaños durante la noche.
De pronto, se les apareció el Angel del Señor y la gloria del Señor los envolvió con su luz. Ellos sintieron un gran temor,
pero el Angel les dijo: "No teman, porque les traigo una buena noticia, una gran alegría para todo el pueblo:
Hoy, en la ciudad de David, les ha nacido un Salvador, que es el Mesías, el Señor.
Y esto les servirá de señal: encontrarán a un niño recién nacido envuelto en pañales y acostado en un pesebre".
Y junto con el Angel, apareció de pronto una multitud del ejército celestial, que alababa a Dios, diciendo:
"¡Gloria a Dios en las alturas, y en la tierra, paz a los hombres amados por él!". 


Natividad de Nuestro Señor Jesucristo (misa de la noche).
Leer el comentario del Evangelio por
Tomás de Celano (c.1190 - c. 1260), biógrafo de San Francisco y de Santa Clara
Vita Prima de san Francisco, § 84-86

San Francisco ante el primer pesebre de Navidad.

Unos quince días antes de Navidad, Francisco dijo: “Quiero evocar el recuerdo del Niño nacido en Belén y de todas las penurias que tuvo que soportar desde su infancia. Lo quiero ver con mis propios ojos, tal como era, acostado en un pesebre y durmiendo sobre heno, entre el buey y la mula...”

Llegó el día de alegría... Convocaron a los hermanos de varios conventos de los alrededores. Con ánimo festivo la gente del país, hombres y mujeres, prepararon, cada cual según sus posibilidades, antorchas y cirios para iluminar esta noche que vería levantarse la Estrella fulgurante que ilumina a todos los tiempos. En llegando, el santo vio que todo estaba preparado y se llenó de alegría. Se había dispuesto un pesebre con heno; había un buey y una mula. La simplicidad dominaba todo, la pobreza triunfaba en el ambiente, toda una lección de humildad. Greccio se había convertido en un nuevo Belén. La noche se hizo clara como el día y deliciosa tanto para los animales como para los hombres. La gente acudía y se llenaba de gozo al ver renovarse el misterio. Los bosques saltaban de gozo, las montañas enviaban el eco. Los hermanos cantaban las alabanzas al Señor y toda la noche transcurría en una gran alegría. El santo pasó la noche de pie ante el pesebre, sobrecogido de compasión, transido de un gozo inefable. Al final, se celebró la misa con el pesebre como altar y el sacerdote quedó embargado de una devoción jamás experimentado antes.

Francisco se revistió de la dalmática, ya que era diácono, y cantó el evangelio con voz sonora...Luego predicó al pueblo y encontró palabras dulces como la miel para hablar del nacimiento del pobre Rey y de la pequeña villa de Belén. 


lunes 24 Diciembre 2012. San Charbel Makhluf

Saber más cosas a propósito de los Santos del día
 
 

San Charbel Makhluf, nació el 8 de Mayo 1828 en Beka'kafra (Libano.) Murió en Annaya, el 24 de Diciembre 1898 en Annaya. (Líbano.) Ermitaño de rito maronita, el primer santo libanés canonizado por la Sede Apostólica en los tiempos modernos. ( El 9 de Octubre de 1977, por el Papa Pablo VI.) "Un ermitaño de la montaña libanesa está inscrito en el número de los Bienaventurados... Un nuevo miembro de santidad monástica enriquece con su ejemplo y con su intercesión a todo el pueblo cristiano.

El puede hacernos entender, en un mundo fascinado por las comodidades y la riqueza, el gran valor de la pobreza, de la penitencia y del ascetismo, para liberar el alma en su ascensión a Dios". Gran amante de la Eucaristía y de la Virgen Santísima. Ejemplo de vida consagrada y de ermitaño. Dios ha querido manifestar su gloria por medio de este humilde ermitaño. Gran cantidad de milagros ocurren por su intercesión. Numerosas de sus imágenes milagrosamente exudan aceite de oliva el cual se utiliza en la oración por los enfermos. Además de ser bien conocido en el Medio Oriente y en toda la Iglesia, en América es particularmente venerado en México a partir de la inmigración maronita que comenzó en el siglo XIX.

Su devoción se propaga en la actualidad muy rápido por el aumento de milagros. Parece que Dios desea utilizar este santo como signo de su deseo de unificar el Oriente con el Occidente. Nació en el pueblo de Beka'kafra, a 140km. del Líbano, capital libanesa, el 8 de mayo, de 1828. Era el quinto hijo de Antun Makhlouf y Brigitte Chidiac, una piadosa familia campesina. Fue bautizado a los ocho días en la Iglesia de Ntra. Señora en su pueblo natal, recibiendo por nombre Yusef (José). A los tres años el padre de Yusef fue inscrito en el ejército turco en la guerra contra los egipcios y muere cuando regresaba a casa. Su madre cuida de la familia siendo gran ejemplo de virtud y fe.

Pasado un tiempo, ella se casa de nuevo con un hombre devoto quien eventualmente será ordenado sacerdote. (En el rito maronita, hombres casados son elegibles al sacerdocio). Yusef ayudó a su padrastro en el ministerio sacerdotal. Ya desde joven era ascético y de profunda oración. Yusef estudió en la pequeña escuela parroquial del pueblo. A la edad de 14 años fue pastor de ovejas y aumenta su oración. Se retiraba con frecuencia a una cueva que descubrió cerca de los pastizales para adentrarse en horas de oración. Por ello recibió muchas burlas de otros jóvenes pastores. Dos de sus tíos maternos eran ermitaños pertenecientes a la Orden Libanesa Maronita. Yusef acudía a ellos con frecuencia para aprender sobre la vida religiosa y el monacato en especial. En el Convento de Annaya, profesó los votos perpetuos como monje en 1853.

Lo enviaron inmediatamente al Monasterio de San Cypriano de Kfifen, donde realizó sus estudios de filosofía y teología, llevando una vida ejemplar de obediencia y observancia. Fue ordenado sacerdote el 23 de julio, de 1859 por Mons. José al Marid, bajo el patriarcado de Paulo Massad. Al poco tiempo regresó al Monasterio de Annaya por orden de sus superiores. Ahí pasó muchos años de vida ejemplar de oración y apostolado. Entre estos, el cuidado de los enfermos, el pastoreo de almas y el trabajo manual en cosas muy humildes. Chárbel recibió autorización para la vida ermitaña el 13 de febrero, de 1875. Desde ese momento hasta su muerte, ocurrida en la ermita de los Santos Pedro y Pablo, la víspera de la Navidad del año 1898, se dedicó a la oración (rezaba 7 veces al día la Liturgia de las Horas), la ascésis, la penitencia y el trabajo manual.

Comía una vez al día y llevaba silicio. El padre Chárbel alcanzó la celebridad después de su muerte, ocurrida el 24 de Diciembre de 1898. Dios quiso señalar a este santo por numerosos prodigios: Su cuerpo se mantiene incorrupto y suda sangre, ocurren prodigios de luz constatados por muchas personas. El pueblo le veneraba como santo aunque la jerarquía, y sus mismos superiores, prohibieron su culto formal mientras la Iglesia no pronunciara su veredicto.
 

Oremos.
 

Dios, infinitamente santo y glorificado en medio de tus santos. Tú que inspiraste al santo monje y ermitaño Chárbel para que viviese y muriese en perfecta unión con Jesúsucristo, dándose la fuerza para renunciar al mundo y hacer triunfar desde su ermita, el heroísmo de sus virtudes monásticas: pobreza, obediencia y santidad. Te imploramos nos concedas la gracia de amarte y servirte siguiendo su ejemplo. Dios Todopoderoso, Tú que has manifestado el poder de la intercesión de San Chárbel a través de sus numerosos milagros y favores, concédenos la gracia que te imploramos por su intercesión (....) Amén. (Padrenuestro, Ave María y Gloria).


Domingo 4o. de Adviento.

Primera: Miq 5, 1-4; segunda: Heb 10, 5-10; Evangelio: Lc 1, 39-48
 



 
Sagrada Escritura:
Primera: Miq 5, 1-4
segunda: Heb 10, 5-10
Evangelio: Lc 1, 39-48


Nexo entre las lecturas

¿Cuáles son las justas relaciones entre el hombre y Dios? Una respuesta a este interrogante nos viene de la liturgia de hoy. Los textos nos indican principalmente las relaciones de Jesús y de María. Relación de Jesús con su Padre (segunda lectura), con Juan Bautista en el seno materno (Evangelio), con la profecía (primera lectura), con el sacerdocio levítico (segunda lectura). Relación de María con el Espíritu Santo, con Isabel, su prima (Evangelio), y sobre todo con el Verbo (Evangelio).


Mensaje doctrinal. 


 1. Relaciones de Jesús. Ser y existir como hombre es estar y entrar en relación. Las relaciones humanas pueden ser sumamente variadas, pero al final se reducen a tres fundamentales: relación con Dios, con el hombre y con el mundo que lo rodea. A la liturgia interesan las dos primeras relaciones. La relación fundamental de Jesús es con su Padre. Es una relación filial de obediencia: "Yo vengo para hacer, oh Dios, Tu voluntad" (segunda lectura). Es la obediencia de un hijo que trata de agradar en todo a su padre. Esta obediencia filial llegará hasta el extremo del sacrificio. No se puede separar, en el misterio cristiano, la Navidad de la Pasión, la Navidad de la Pascua. Jesús mantiene su obediencia al Padre mediante su relación con la profecía, una relación de cumplimiento. El profeta Miqueas apostrofa a Belén, diciéndola que no será la ciudad más pequeña de Judá, porque en ella nacerá el dominador de Israel. Jesús, naciendo en Belén, lleva a cumplimiento la profecía, en actitud de obediencia a la historia salvífica trazada por el Padre. La relación de Jesús con María es una relación oculta, extraordinaria: La de quien alimenta su fe y se alimenta de su sangre. El Evangelio nos habla, finalmente, de una relación misteriosa de Jesús, en el seno de María, con Juan Bautista, en el seno de Isabel. En la presencia de Dios en la historia, mediante María santísima, llena de gozo al último de los profetas de Israel y representante último y cualificado del Antiguo Testamento, Juan Bautista. Es el gozo mesiánico, que preanuncia la hora de la salvación. La obediencia filial de Jesús, que asume la condición del tiempo y de la historia, fructifica en la alegría redentora que aporta a los hombres.

2. Relación de María. Hay dos relaciones de María, que no aparecen en los textos litúrgicos, pero que están implícitas: la relación con el Espíritu Santo y con el Verbo encarnado en su seno. Sin estas dos relaciones no se explica el episodio de la visita de María a su prima Isabel. La relación íntima y personal del Espíritu Santo con María ha hecho posible que el Verbo de Dios asuma carne y se vaya formando hombre en su seno materno. La relación de María con el Verbo de Dios es extremamente misteriosa y delicada: Misteriosa porque la fecundación de su seno es obra de Dios mismo; delicada, porque está dando a Dios su carne y su sangre, pero sobre todo su amor, su dedicación, su entrega total. La relación de María con Isabel es de servicio. Viene a ayudarla en los últimos meses de embarazo. Viene movida por los lazos naturales, pero sobre todo por el Espíritu de Dios y por el Verbo que siente presente en su seno: un movimiento natural y neumático, al mismo tiempo. En el canto del Magnificat, María eleva su voz a Dios para alabarle y agradecerle con gozo el misterio que encierra en su seno, a pesar de su pequeñez y de su humildad. ¿Cómo no alabar a quien se ha dignado acudir a ella para llevar a cumplimiento su designio de salvación, y la aspiración más sublime e intensa de los hombres? Por último, en María se lleva a cabo también la profecía de Miqueas: Ella es aquélla que "dará a luz cuando deba dar a luz" al Mesías. La relación de maternidad, a través de la cual se expresa toda la feminidad de María en relación con Jesús.


Sugerencias pastorales.


1. Saber relacionarse. En la conversación humana es frecuente escuchar: "Hay que saber relacionarse". Con ello se quiere decir que es bueno tener muchas relaciones, y sobre todo relaciones con gente influyente. La razón es evidente: así se tiene la posibilidad de que se abran muchas puertas en los diversos ámbitos de la vida humana: político, financiero, social, profesional, educativo, religioso...Yo quiero invitar a mis hermanos en la fe y en el sacerdocio a saber relacionarse con personas de extraordinaria influencia: con Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo; con María santísima, nuestra madre y nuestra reina; con los santos, nuestros hermanos y protectores desde el cielo. Estas relaciones no te dan acceso, claro está, a excelente puesto de trabajo, ni a un negocio redondo. Estas relaciones, más bien ejercen su influjo en tu interior, transformándolo; en tu visión de las cosas y de la vida, haciendo que sea según Dios; en tu relación con los hombres y con las cosas, de forma que esté siempre inspirada por el amor y por el servicio; en tu relación con tu propia historia, convirtiéndola, tal vez, de una historia sin sentido a un sentido con historia. ¡Cuántos bienes nos pueden venir -y podemos obtener para los demás-, si sabemos relacionarnos con Dios, con la Virgen, con los santos! En el campo de la historia es importante saber relacionarse, ¿no lo va a ser igualmente en el campo del espíritu? Bienaventurados los que saben relacionarse, porque serán como un árbol frondoso que dé frutos en sazón: frutos de bien, de felicidad, de salvación.

2. Relacionarse por el Reino. Los cristianos vivimos en el mundo, en el reino de la historia, aunque pertenecemos al Reino de Dios. Y en el reino de la historia no poco cuentan las relaciones humanas. No tenemos por qué despreciarlas. Tampoco hemos de abusar de ellas, poniéndolas al servicio de nuestros intereses egoístas. Hemos de servirnos de ellas para la edificación del Reino de Dios. Hemos de relacionarnos con quienes tienen poder, para que nos ayuden en favor de quienes no sólo no tienen poder, pero ni siquiera alimento, casa, vestido, derechos. Hemos de relacionarnos con los necesitados, para que tomen conciencia de que el Reino de Dios les pertenece y les invita a poner todos los medios para hacer más humana su existencia, más digna, más libre, más feliz. Hay que relacionarse con las fuerzas vivas y poderosas de un pueblo, de una ciudad, de un estado, de un país, para convencerlas, si no lo están todavía, de que son hijos del Reino de Dios en la medida en que utilizan sus fuerzas y su poder en beneficio de los más necesitados. Y una vez convencidos, que pongan manos a la obra. Si todos los cristianos utilizáramos nuestras relaciones para ponerlas al servicio del Reino, seguramente que el mundo caminaría por derroteros más humanos, y más marcados por nuestra fe en Jesucristo. Jesucristo entró en contacto con la historia para instaurar el Reino de su Padre. Después de más de 2000 años, ¿qué hacemos nosotros los cristianos?


Regalos especiales para esta Navidad.

Ahora que entramos en esta temporada de fiestas decembrinas me imagino que ya habrás empezado la búsqueda de tus obsequios navideños. Así pues, quiero aprovechar la oportunidad para recomendarte algunos de los mejores regalos que puedes darle a tus seres queridos esta Navidad y que al mismo tiempo te ayudarán a recordarte el por qué de esta celebración.


No olvidemos que el sentido de regalar algo no es otro que el de decirle a aquel ser querido "Dejé de pensar en mi para pensar en ti". Así que si no dejamos de lado este principio fundamental entonces podremos estar seguros de que aquello que regalemos estará lleno de sentido y significado.
 
Regalo #1: Comprensión.


Envuelve para regalo tus ojos y oídos y disponte a observar y a escuchar todo lo que los demás tienen que hacer y decir. Deja de centrarte durante esta temporada en tus propias ideas y pensamientos y proponte escuchar y observar las maravillas que suceden a nuestro alrededor cuando estamos disponibles para observar y escuchar. Regálale a tus seres queridos tu disposición de intentar ponerte en su lugar y ver el mundo a través de sus ojos y escucharlo a través de sus oídos.
Sugerencia: Invítale un café a un amigo y dile que te externe su opinión acerca de un tema en específico y mientras lo hace proponte hablar lo menos posible y escucharlo al máximo.

Regalo #2: Perdón.


Definitivamente uno de los regalos más ricos y formativos. Aprovecha la Navidad y toda la magia que produce en el ambiente para perdonar y pedir perdón a aquella persona de la que te alejaste por alguna razón. No importa cual haya sido la causa de esta separación y distanciamiento, siempre habrá una oportunidad para arreglar el problema. Además te darás cuenta que este regalo, al hacerlo efectivo, te renueva más que cualquier cambio de imagen y ropa que pudieras comprar.
Sugerencia: Escribe una carta de perdón y envíala antes de contactar a la persona de tal forma que tengan un motivo para volver a dialogar.

Regalo #3: Tiempo


Sin duda alguna el regalo más valioso de todos. No existe algo más hermoso que regalarle tu tiempo a alguien más. El tiempo, ese elemento tan preciado que no puede ser comprado ni canjeado por nada, vale mucho. Dedicarle minutos de tu vida a alguien es un gran regalo.
Sugerencia: Ofrécete pasar todo un día con tus papás cediéndoles la iniciativa para decidir que hacer y donde ir.


Regalo #4: Ayuda.


Muy ligado con el anterior uno de los regalos que todos quisiéramos recibir, más que cualquier cosa material, es la voluntad de alguien para ayudarnos a solucionar algún problema o brindarnos un buen consejo de vida. Estos son los detalles que le dan sentido a lo que celebramos en la Navidad y que la hacen tan especial.
Sugerencia: Recolecta ropa y cobijas entre tus seres queridos y dónalas a una institución de asistencia social.

Finalmente te puedo recomendar que esta Navidad regales aquello que sólo tu puedas dar, y que por lo mismo representa algo tan especial. Por eso, mi última sugerencia de regalo sería…


Regalo #5: ¡Tú mismo!.


Al final, el mejor regalo que puedes dar es aquel que involucra dar lo mejor que tienes: ¡Tú mismo! No existe mejor regalo que decirle a alguien: "Todo mi ser está dispuesto a acompañarte en estas fiestas". Este es el verdadero sentido de la Navidad y percibimos su magia porque nos recuerda cual es el elemento central que da sentido a nuestra presencia en este mundo: Amar al prójimo como a nosotros mismos.

MATERIAL TOMADO DE CATHOLIC.NET

DAMOS GRACIAS A TODOS NUESTROS LECTORES POPR SER PARTE DE ESTE MINISTERIO DE EVANGELIZACION QUE DURANTE TANTOS AÑOS NOS SIGUEN, NOS VISITAN Y NOS AYUDAN A LLEVAR ESTA PAGINA A OTROS EN EL MUNDO QUE DESEAN CONOCER LA PALABRA Y PROMESA DE NUESTRO SEÑOR DIOS PADRE.